La provincia de Mendoza se encuentra enfrentando una nueva problemática ambiental: la proliferación de la chinche del arce (Boisea trivittata), una especie invasora originaria de América del Norte. Esta plaga, que ha ido ganando terreno en los últimos años, representa una seria amenaza para el arbolado urbano, en particular para los árboles de arce y fresno.
La chinche del arce, un insecto de pequeño tamaño y color rojo intenso, se alimenta de las semillas de estos árboles, debilitándolos progresivamente. Muchas de las preocupaciones surgen por su parecido con las vinchucas. Las vinchucas se ocultan durante el día y salen a la noche para alimentarse, por lo cual es importante reconocer indicios de su presencia a través de rastros de su materia fecal en las paredes o de mudas (“pelechos”) que se desprenden a medida que van creciendo y pueden encontrarse en el hogar.
La Dirección de Ambiente del municipio alerta sobre la proliferación de esta especie en el departamento e informa:
- No es una plaga peligrosa para las personas.
- Se encuentra en arces y fresnos.
- Se alimentan de semillas y savia de hojas.
- En invierno, se esconden en desechos y hojas secas.
Algunas recomendaciones para combatirla son:
- Evitar el uso de insecticidas de amplio espectro: Estos productos pueden dañar a otros insectos beneficiosos para combatir la chinche del arce (arañas y mantis) y contaminar el ambiente.
- Limpiar regularmente los espacios verdes: Eliminar las hojas caídas y las semillas de los árboles puede reducir los sitios de reproducción de las chinches.
- Sellar las grietas y hendiduras de las viviendas: Esto evitará que las chinches ingresen a los hogares en busca de refugio.



